Kinect es básicamente un periférico que podemos conectar a la Xbox 360 que consta de una cámara web y sensores para captar el movimiento del usuario. Claro que también dispone de un micrófono para comunicarnos con voz y un procesador poderoso para poder informarle al juego de todos nuestros movimientos. Algunos podrán notar reminiscencias con la antigua tecnología Eye-toy de Sony, y si bien las hay podemos considerar a Kinect como un paso adelante en el uso de esta tecnología. Este dispositivo puede reflejar nuestros movimientos con una fidelidad admirable, por lo que es de destacar.
En un panorama en el que la Wii con su mando con sensor de movimientodomina las ventas era probable que otras empresas también buscaran beneficios, y Microsoft lo está intentando con Kinect. La clave del éxito residirá probablemente en la calidad de los juegos que se saquen para el dispositivo, que logren entretener al usuario y captar gente nueva en los videojuegos como hizo la Wii en su época. Y segundo, por lo que no menos importante el precio. Se ha confirmado por parte de Microsoft que valdrá 150 euros, ya veremos como reacciona el público y si los juegos nos atraen a pagar esa cantidad extra.
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